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Actividad (5): Test de Ruffier-Dickson

La unidad didáctica de “acondicionamiento físico” la hemos trabajado todos los trimestres. Dentro del primer trimestre con juegos y actividades específicas sobre las cualidades físicas básicas (flexibilidad, fuerza, velocidad y resistencia).

Una vez hechos estos trabajos, realizamos las distintas pruebas físicas sobre las cuatro cualidades físicas básicas colocando los resultados en unas gráficas.

En el segundo trimestre, volvimos a realizar las distintas pruebas donde debíamos superar nuestras antiguas marcas conociendo nuestro cuerpo y teniendo en cuenta que teníamos que regularnos en las distintas pruebas para poder superarnos en el tercer trimestre.

Desafortunadamente, en el tercer trimestre no hemos podido hacer dichas pruebas pero si os he mandado unas recomendaciones de actividades físicas para trabajar las cuatro cualidades físicas básicas.

Ahora os presento un test, de los muchos que existen para  conocer nuestra forma física. Es un test que nos da una idea de como se adapta nuestro corazón al esfuerzo físico. Test de Ruffier-Dickson.

A lo largo del primer trimestre y en alguna sesión del segundo trimestre, hemos aprendido a medir nuestra frecuencia cardiaca tanto en reposo como después del ejercicio.

Recordamos que la frecuencia cardiaca se mide en un minuto pero que las mediamos en 15 segundos y después multiplicábamos por 4 para así obtener dichas pulsaciones en un minuto.

Ahora os presento como realizar dicho test, tanto por escrito como en un vídeo explicativo adjunto.

Los pasos a seguir son los siguientes:

1. La persona se sitúa de pie para medir su frecuencia cardíaca previa (P1) a la realización del esfuerzo.

 

2. La persona comienza de pie y debe llevar a cabo un total de 30 flexiones profundas de piernas. Esto quiere decir que estando erguida completamente, la persona debe quedarse de cuclillas y volver a subir. Hay que realizar 30 flexiones completas en 45 segundos, no siendo válido el esfuerzo si no se completan las 30 flexiones. Inmediatamente después de terminar la última flexión de piernas, hay que volver a medir la frecuencia cardíaca (P2).

 

3. Transcurrido un minuto después del final del ejercicio de flexiones de piernas, hay que realizar la tercera y última medición de la frecuencia cardíaca (P3), dando por finalizado el ejercicio.

 

P1: frecuencia cardiaca en reposo

P2: frecuencia cardiaca nada mas finalizar las 30 flexiones de piernas o sentadillas.

P3: frecuencia cardiaca después de descansar un minuto desde que hice las sentadillas.

Ejemplo para realiza el test de Ruffier-Dickson:

Indice de Ruffier (I) = (P1 + P2 + P3)-200/10

Imaginemos que hemos calculado nuestras pulsaciones cardíacas en 75 antes de realizar el test. Inmediatamente después de las 30 flexiones de piernas, nuestras pulsaciones se han disparado hasta las 140. Y tras un minuto de recuperación, nuestras pulsaciones se han situado en 95. Con estos valores, la fórmula de Ruffier nos queda así:  Indice de Ruffier (I) = (75 + 140 + 95) - 200 / 10. Sumando las tres frecuencias cardíacas obtenemos el valor 310. Restando 200 nos queda un valor de 110, que dividido entre 10 nos daría un índice de 11.

De 0 a 4: Estas hecho un verdadero atleta

De 4 a 8: Tienes una forma física muy buena

 

De 8 a 12: No está nada mal, te mantienes bien físicamente

 

De 12 a 16: Debes realizar de manera más frecuente actividad física

De más de 16: Hay que ponerse las pilas y empezar a trabajar poco a poco.





Fecha límite de entrega: 5/6/2020

NOMBRE:                                                                                              CURSO:

APELLIDOS:

 

Test de Ruffier-Dickson

Indice de Ruffier (I) = (P1 + P2 + P3)-200/10

 

1.

P1=

P2=

P3=

 

2.    (P1 + P2 + P3)-200/10=

 

 

3.  Indice de Ruffier (I) = 

 

4. Marca cuál es tu resultado:

 

De 0 a 4: Estas hecho un verdadero atleta

De 4 a 8: Tienes una forma física muy buena

De 8 a 12: No está nada mal, te mantienes bien físicamente

De 12 a 16: Debes realizar de manera más frecuente actividad física

De más de 16: Hay que ponerse las pilas y empezar a trabajar poco a poco.

 

 


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